Por Marco Santivañez / EL PUEBLO.- Desde 1960, la República de Cuba sufre el más largo embargo comercial, económico y financiero de la historia moderna en el mundo.
Desde el pasado siglo comenzó esta restricción impuesta por Estados Unidos, que hizo que la situación de Cuba tenga muchos problemas económicos, pero hasta ahora el país caribeño mantiene su soberanía y depende de las pocas exportaciones que se generan desde la ‘Isla’.
Pese a que en la administración de Barack Obama había un acercamiento y se estaba caminando rumbo al desbloqueo, todo esto cambió desde el primer día en el que los republicanos asumieron el poder encabezados por Donald Trump, las medidas del bloqueo fueron mayores y más asfixiantes, por lo que este 23 de junio, en la Asamblea de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Cuba solicitará por vigésima novena vez la supresión de este embargo que supera los 60 años.
Conversamos con Danilo Sánchez Vázquez, embajador de Cuba en Bolivia, sobre la dura situación que vive el país caribeño y lo que se espera el 23 de junio en la Asamblea General de la ONU.
“Como cada año en la Asamblea General de las Naciones Unidas, Cuba presenta un proyecto de resolución que es sometido a los cerca de 191 Estados que conforman ONU. Para Cuba tiene un significado especial, para todo los cubanos y los amigos de Cuba en el mundo, porque el gran reto y enorme desafío que tienen es tratar de que se elimine el bloqueo por que sin duda ésta es una política genocida cruel que se practica contra Cuba hace más de 70 años. La resolución que Cuba va a presentar es una muy breve, que es el mismo texto que se ha presentado los últimos 28 años, se va a presentar por vigésima novena ocasión, un texto breve, claro, preciso, contundente, que dice la necesidad de poner fin al bloqueo económico comercial y financiero que ejerce el Gobierno de los Estados Unidos”, sostiene el diplomático.
El texto que presentará Cuba fue aprobado mayoritariamente durante los últimos años; en noviembre del año pasado fue la última vez que se votó y el país caribeño recibió el apoyo mayoritario de 187 naciones, contra dos abstenciones y tres países en contra, en este caso fueron Estados Unidos, Israel y Brasil.
“El bloqueo concita la repulsa de la inmensa mayoría de la comunidad internacional, y nosotros aspiramos a que en esta ocasión, cuando el canciller Bruno Rodríguez Parrilla presente la solicitud, reciba un respaldo contundente de la mayoría de los países”, sostiene la autoridad.
La mayoría de los países que conforman la Asamblea de la ONU sabe del daño paulatino que el bloqueo generó en más de medio siglo de esta determinación.
“Constituye el principal obstáculo al desarrollo económico y social del país, no hay ningún otro bloqueo que se haya mantenido contra ningún país por el imperio más grande del mundo, apoyado a veces por algunos acólitos. Somos un país pequeño con recursos escasos a pocos kilómetros de la frontera norteamericana, pero supimos mantener nuestra dignidad, nuestro heroísmo, convicciones, el bloqueo incide en toda la vida del país, tiene repercusiones enormes para la vida cotidiana del ser humano en Cuba.
El embajador de Cuba en Bolivia conceptualiza cada uno de los puntos que golpean a Cuba con el bloqueo que se vive desde la década del 60 del siglo pasado.
“Primero, es una política de imposición a un país que tiene todo derecho a desarrollar su proyecto económico político social, como todos los Estados deberían tener, y es lo primero que nosotros refutamos.
Segundo, el bloqueo impide que el país pueda desarrollarse económicamente con plenitud y libertad. Cuba no puede desarrollar o utilizar el dólar que ha puesto el propio imperio norteamericano en el mundo; está prohibido que Cuba utilice el dólar para sus transacciones comerciales, los bancos del mundo son reticentes a hacer envíos transferencias hacia mi país, porque lo prohíbe el bloqueo. La mayoría de los bancos tiene algún vínculo con bancos norteamericanos, entonces evitan esos contactos. En este ultimo año 137 bancos recibieron algún tipo de amenaza o condena. Hay bancos poderosos en el mundo, bancos europeos que recibieron sanciones millonarias en periodos precedentes en la época de Obama, por ejemplo, sanciones tremendas por mantener algún tipo de relación con Cuba”.
En la actualidad, según el embajador, Cuba no puede usar dólares, por lo que las transacciones son más difíciles y el país pierde en sus ingresos, pero a esto se suma el tema tecnológico, que si tiene componentes norteamericanos no pueden ser utilizados.
“Cuba no puede comprar un equipamiento que tenga más de un 10% de componentes norteamericanos, y la ciencia, la tecnología norteamericana no es un secreto que es importantísima, entonces qué artefacto importante, equipo novedoso en el mundo no tiene algún componente que provenga de ahí, lo mismo pasa con Estados Unidos que no compra ningún producto de un tercer país, que tenga un porcentaje de componente cubano, así que si usted se quiere comer un caramelo cubano en Estados Unidos que tenga azúcar cubana seguramente va a tener dificultad, tendrá que ir a buscar a otro lado la sabrosura de nuestro caramelo”, manifiesta.
De Trump a Biden sin cambios en sus políticas con Cuba
La administración de Donald Trump fue una de las más radicales en la historia del bloqueo comercial, económico y financiero, pero se consideraba que esa política podría cambiar con la llegada de Biden y los demócratas a la Casa Blanca.
“Lamentablemente tengo que decir que hay muy pocos cambios con la política de Biden en relación a Cuba. En su campaña leyeron, escucharon que revisarían la política hacia mi país en relación a la que aplicó Trump, pero no hubo ningún cambio, se mantiene inalterable la política hostil, desarrollada, incrementada, aumentada por la administración de Donald Trump, que aplicó nada menos que alrededor de 243 medidas adicionales a las históricas que llegan al grado de la demencia, y pongo algunos ejemplos: está prohibido por ley norteamericana que los turistas norteamericanos vayan a Cuba. Ir a playa cubana a Varadero a tomarse un mojito puede ser un delito, lo que demuestra que si perjudicas al gobierno, perjudicas al pueblo, prohibieron enviar remesas al país, imagínense lo que significa eso. Cuba tiene más de un millón de cubanos viviendo en Estados Unidos no por la revolución, hace 300 años que viven cubanos allá y no puede enviar a su familiar a su mamá, a su abuela o a su hijo una remesa, esto fue prohibido por la administración Trump”, explica, y recuerda que en otras etapas del bloqueo los cubanos podían mandar 1.000 dólares trimestralmente, pero en la actualidad es cero.
“Biden dejó esas medidas intactas, ahí hay un lobby de personas de origen cubano, algunos han nacido en Estados Unidos, pero son de origen cubano, muy activos en la política exterior en contra de Cuba, no voy a mencionar nombres, ustedes los conocen perfectamente, algunos son muy prominentes, muy activos, muy agresivos, muy reaccionarios y muy dañinos, que tratan de evitar una relación respetuosa, constructiva entre Estados, que nos ayudaría a interactuar en la lucha contra el narcotráfico, la lucha en favor del medioambiente, la protección del fauna marina, vaya cuestiones tan elementales”, dice el embajador, que conoce muy bien la actuación de los activistas cubanos que siempre estuvieron en contra del proceso revolucionario en la Isla.
El ALBA-TCP, Cuba y el bloqueo
Uno de los aciertos de los gobiernos de países progresistas es la creación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que este 24 de junio organiza la Cumbre en Caracas, Venezuela, en homenaje al bicentenario de la Batalla de Carabobo.
“El ALBA-TCP es un proyecto de naciones sudamericanas y caribeñas, con la intención de buscar la integración económica, el relacionamiento político, tratar de propiciar complementariedad de los que unos tienen y otros no, y no la competencia, sino el desarrollo armonioso de nuestras economías”, explica el diplomático.
Para el ALBA-TCP todos los Estados son iguales, con todos los derechos, las acciones unidas. “No hay país más importante que otro, todos son importantes, todos juegan un rol, o sea esta pretensión como bloque político y económico de integración, y por tanto son Estados con las posturas similares, ahí está Bolivia, está Cuba, Nicaragua, Venezuela, islas del caribe, y nos hemos tratado de ayudar, a veces se nos olvida, pero a mí me gusta traerlo a colación; por ejemplo Bolivia, el esfuerzo colosal que tiene repercusiones hasta hoy, que se hizo la alfabetización en este país, es una iniciativa del ALBA-TCP”, relata Danilo Sánchez.
Para el embajador de Cuba, es importante la presencia de los países que integran el ALBA-TCP, y ve en el secretario Sancha Llorenti el renacimiento del bloque.
“Sacha estuvo muy activo, promoviendo encuentros. Hace poco hicieron uno con la prensa, con los medios del ALBA para ver cómo confluimos, cómo nos ayudamos, cómo promovemos la difusión que a veces anda tan sesgada, para que el mensaje sea claro; ahí está Telesur que trae un mensaje tan interesante, y las radios que juegan un rol fundamental”, sostiene el embajador.
Este 23 de junio, el embajador estará atento a la determinación que pueda tomar la Asamblea de la Organización de Naciones Unidas, que recibirá la resolución enviada por Cuba solicitando el levantamiento del bloqueo, que hace 29 años tiene una respuesta favorable, pero que tiene dos voces contrarias, como son las de Estados Unidos e Israel, aunque en las dos últimas votaciones se unió el gobierno de Brasil mediante las políticas poco amistosas de Jair Bolsonaro.
“Esperaremos, como todos los años, el apoyo de la mayoría de los gobiernos que no están de acuerdo con el bloqueo más largo de la historia del mundo”, concluye Danilo Sánchez Vázquez, embajador de Cuba en Bolivia.
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