Independiente Petrolero de Sucre es el campeón del fútbol boliviano

Correo del Sur /SUCRE.- ¡Histórico, histórico! Independiente escribió la página más gloriosa de su historia al coronarse campeón por primera vez en 89 años de vida institucional. Su agónica victoria (3-2) ante Guabirá en la “Caldera del Diablo” de Montero, ayer, desató la locura en Sucre y cerró con creces la rutilante campaña en su retorno al fútbol profesional tras permanecer 18 años en la esfera asociacionista.

El 26 de octubre de 2003, este mismo escenario deportivo había sido testigo del descenso del Matador, pero una vez más quedó demostrado que el fútbol da revanchas y el Gilberto Parada vio agigantarse a un equipo que irónicamente durante todo el desarrollo del campeonato nunca pudo ser líder hasta el minuto 96 del choque de este domingo ante los azucareros, cuando Juan Godoy sacó de la galera un tercer tanto que desbordó el frenesí y esculpió el nombre del Matador en las fojas de la historia del balompié nacional.

Nelson Amarilla a los 20 segundos (en contra) Martín Prost (73’) habían anotado para el Inde, pero el “Pato” selló una espectacular campaña que dejó demostrado que la fuerte inversión económica de los “más pintados” como Bolívar, Always Ready, The Strongest y Wilstermann se quedó corta ante el esfuerzo, lealtad y compromiso de los dirigentes, cuerpo técnico y jugadores.

El triunfo de ayer sobre los azucareros le permitió al Inde mirar al resto desde lo más alto de la tabla de posiciones con 65 puntos, uno más que el subcampeón Always Ready (64) y The Strongest (63), que acabó en la tercera casilla.

El logro del Matador se hace todavía más brillante al haberlo conseguido en el año de su retorno al fútbol de élite, algo inédito en el balompié nacional, ya que según el periodista deportivo, estadístico, fotógrafo y dibujante Víctor Quispe Perca, solo Bolívar lo logró en 1966, después de jugar en la “B” en 1965. Fue campeón paceño en 1966 y campeón nacional ese mismo año.

En las calles de Sucre las lágrimas de algunos hinchas no se dejaron esperar, más aún después de que el equipo de sus amores estuvo a punto de quedar en el olvido con su descenso en 2003 y un triste recorrido en los torneos locales, hasta que llegó la presidenta Jenny Montaño y un grupo de dirigentes que le cambiaron la cara y lo llevaron a pelear sitiales de privilegio.

LOS 90 MINUTOS

El Inde arrancó el partido embalado. Ni siquiera habían transcurrido 20 segundos desde el pitazo inicial, cuando rompió el cero, tras una incursión de Martín Prost y Erik Correa en el área que terminó en un centro para que Amarilla desvíe el curso del esférico y desubique al arquero Saidt Mustafá.

Prost pudo ampliar la cuenta al minuto 14, pero no aprovechó un rebote que dio Mustafá, y mandó el esférico lejos y desviado.

Guabirá despertó de un sueño profundo y se recuperó del golpe, tomando las riendas del compromiso, insistiendo por las bandas y haciendo protagonistas a sus atacantes Kevin Mina y John Jairo Mosquera para exigir al guardameta albirrojo, Elder Arauz.

Precisamente en uno de esos intentos llegó el empate con un puente aéreo que nació en el flanco izquierdo y terminó en un cabezazo de Mosquera que la mandó a guardar dejando estático a Arauz (23’).

Minutos después, el colombiano Erick Correa abandonó el campo de juego por lesión para permitir el ingreso del “héroe”Juan Godoy, aunque el gol de la paridad golpeó aún más la parte anímica del albirrojo que no encontraba más que en las infracciones la manera de frenar el fútbol que propuso el azucarero hasta el final de la primera mitad.

LA GRAN REMONTADA 

En el complemento, el equipo dueño de casa no bajó la intensidad y fruto a su constancia se puso en ventaja a los 62 minutos con un cabezazo de Kevin Mina y dejó masticando bronca a los albirrojos porque se les escapaba su mayor objetivo: la corona de campeón.

Herido en su amor propio y enterado de lo que sucedía en Santa Cruz y Cochabamba, Independiente tomó oxígeno y se fue contra el arco rival, dándole mayor protagonismo al goleador Prost en el área contraria. Después de tanto martillar, Denilson Valda aprovechó un error rival y metió un pase al área para que el atacante argentino dispare cruzado y rasante que superó a Mustafá a los 73’ para el 2-2.

En ese momento y con los resultados que se estaban dando, el título se debía definir en un partido extra entre los de Achumani y los capitalinos, pero Independiente no se resignó y fue a buscar la victoria

El minuto 94 dejó a muchos congelados, ya que Guabirá estuvo a punto de ahogarle la fiesta al Matador y despacharlo sin nada, pero el tiro pegó en el travesaño de Arauz, además Ángel Vaca marcó de cabeza un gol correctamente anulado por posición adelantada.

El “Loco”, fiel a su estilo mandó al campo al defensor paraguayo López, pero que en vez de acomodarse en la saga se fue al frente para generar mayor presión y abrir espacios para desnivelar el marcador. Una locura de Robledo.

En los minutos finales el crédito capitalino aprovechó el juego por los flancos hasta que el tiempo de adición (96’), Godoy cazó un rebote en el corazón del área y con un remate de muslo desde el frente del arco tras un rebote que dio Mustafá resolvió el encuentro y desató la locura de todos quienes se identifican con los colores rojo y blanco.

Con algunos incidentes de por medio en la recta final, el árbitro Ángel Campos se llevó el pito a la boca y decretó el final y desató el descontrol y el llanto no solamente en los protagonistas, sino también en la afición que se trasladó hasta Montero y aquella que se quedó en Sucre y siguió las incidencias del match por  radio, televisión o redes sociales.

Marcelo “Loco” Robledo quiere seguir en el Inde 

Independiente, el nuevo campeón y el más ganador del torneo 2021, salió airoso en 20 de los 30 partidos disputados (66,66%). Esta brillante campaña tiene que ver con la mano de Marcelo Robledo, el mejor técnico del certamen que supo acomodar sus fichas y armar un plantel “todo terreno” y ahora quiere seguir dirigiendo en la Copa Libertadores.

Fiel a su estilo, el “Loco” gritó, reclamó, sonrió y hasta lloró de emoción con el Matador. Antes de enfrentarse a Guabirá ya había advertido a sus pupilos que “no hay nada mejor que pelear el título”.

El DT de 42 años, al consagrarse campeón destacó la humildad de sus dirigidos para asumir el reto que se impusieron a principio de temporada y celebró de gran manera el título, junto a sus jugadores, dirigentes y la hinchada.

Con relación a su futuro mostró su deseo de continuar en Sucre en la próxima temporada dirigir al Matador en la Copa.

“Yo quiero quedarme en el club, pero la decisión final no depende de mí. Esperaremos en los próximos días para ver qué pasa”, sostuvo.

Martín Prost, el hombre gol que tiene Independiente

Independiente no solo es el campeón del fútbol boliviano, sino que también tiene en sus filas a Martín Prost, el goleador del torneo 2021 con 19 conquistas. Dos más que Carmelo Algarañaz, de Always Ready.

“Es una felicidad enorme que Independiente sea campeón y en lo personal que termine como goleador del campeonato. Aquí lo vital ha sido el equipo que trabajó con humildad desde el primer día”, dijo.

Prost de 33 años, se fue ganando a la hinchada albirroja a fuerza de goles. Sus números son extraordinarios con la camiseta del Matador. Anotó un total de 19 goles, un promedio de 1,5 por partido.

Entre 2018 y 2019 jugó en Sport Boys Warnes y marcó 22 goles en 50 partidos. Ayer dijo que al club le hacía falta este logro para crecer como institución.

“El club tiene que crecer mucho si quiere seguir sumando éxitos”, expresó el ariete del nuevo monarca del fútbol nacional y la hinchada ya pide que sus goles se queden en la capital.

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