Por Edwin Condori/ La Razón.- El Banco Central de Bolivia (BCB), mediante un comunicado de prensa, confirmó este miércoles que el país sigue manteniendo una inflación “baja y estable” como en la gestión 2021.
“Durante los primeros dos meses del año, la inflación se mantuvo estable y en niveles bajos acumulando un 0,43%, continuando con la trayectoria observada en la gestión 2021”, cita el documento.
En 2021, Bolivia logró el nivel más bajo de la inflación en América del Sur y ahora también, según el BCB, proyecta para el 2022 “una trayectoria estable gracias al modelo económico social comunitario productivo, así como al acertado manejo de los instrumentos de política económica a cargo del Banco Central”.
“Asimismo, las expectativas de la población acerca del comportamiento futuro de los precios, reflejadas en la nueva encuesta de expectativas económicas del ente emisor, señalan una trayectoria estable”, destaca el BCB.
Estos niveles y perspectivas de la inflación en Bolivia, según su versión, son aún más destacables en un contexto donde otras economías en el mundo están atravesando incrementos sustanciales de sus precios, incluso por encima de las metas fijadas por sus bancos centrales.
Sin embargo, en el caso boliviano, de acuerdo con la versión del ente emisor, diferentes factores influyeron para este logro, entre ellos, “el buen desempeño del sector agropecuario, gracias al apoyo sostenido del Gobierno al sector productivo, que permitió mantener una oferta estable y abarrotada de alimentos”.
Del mismo modo, el ente emisor atribuyó este logro al “acertado manejo” de los instrumentos de política-económica a cargo del Banco Central de Bolivia, “los cuales, a la par de mantener la estabilidad de precios, coadyuvan con la recuperación económica, cumpliendo con su mandato constitucional de mantener la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda para contribuir al desarrollo económico y social”.
“Por otra parte, la estabilidad de la política cambiaria, la cual contrasta con la volatilidad de los tipos de cambio observada en algunos socios comerciales, jugó un rol preponderante en el control de las presiones inflacionarias externas. (Por tanto) el conjunto de estos factores, contribuyó a que Bolivia registre la tasa de inflación más baja en América del Sur en 2021, favoreciendo el consumo de las familias bolivianas”, sostiene el Banco Central.