PAGINA 12 / BUENOS AIRES.- Mauricio Macri ordenó y organizó desde la Casa Rosada los detalles para la salida de las 70.000 balas antitumulto que terminaron en poder de la policía y de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) el 13 de noviembre de 2019, cuando ya el golpe contra Evo Morales era un hecho. Con ese argumento, el gobierno de Alberto Fernández amplió este jueves la denuncia por el contrabando de municiones contra el expresidente y apuntó a tres funcionarios de su riñón como nuevos acusados: el exjefe de Gabinete Marcos Peña, el excanciller Jorge Faurie y el exsecretario de Asuntos Estratégicos Fulvio Pompeo.
“El contrabando de armas a Bolivia fue ordenado y organizado en forma directa por las máximas autoridades del gobierno nacional, con el expresidente Mauricio Macri a la cabeza”, dice la presentación que firmaron el ministro de Justicia Martín Soria, la ministra de Seguridad Sabina Frederic y la titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) Mercedes Marcó del Pont.
Soria, Frederic y Marcó del Pont apuntan a Macri por su rol como organizador del envío de armas a las fuerzas que apoyaron el golpe contra Evo Morales; a Peña por haber actuado como coordinador junto con Pompeo y a Faurie por haber dado la coartada que permitió la salida de las municiones al advertir que era necesario enviar un refuerzo de seguridad para la embajada argentina en La Paz.
“Cada vez surgen más pruebas de que el gobierno de Macri cargó las armas de la dictadura boliviana. No les quedó promesa por incumplir: llegaron al gobierno prometiendo la República y se fueron apoyando un golpe de Estado”, dijo Soria a Página/12 después de presentar la ampliación de la denuncia.
Los hechos que dieron lugar a la nueva presentación se circunscriben todos al 12 de noviembre de 2019. Ese día, al filo de la medianoche, partió el Hércules argentino con once gendarmes a bordo. Llevaban también 70.000 balas antitumulto sin declarar: 40.000 de ellas terminaron en poder de la FAB y 26.900 de la Policía de Bolivia. Aún resta saber qué pasó con las 3100 restantes. Una de las hipótesis que manejaba el gobierno boliviano es que hayan podido ser cedidas a grupos paramilitares. La certeza es que ni uno solo de esos cartuchos volvió a la Argentina con los gendarmes.
El 12 de noviembre de 2019, Macri llegó a la Casa Rosada a las 9.50 y permaneció hasta las 17.49. La actividad presidencial siguió después en Olivos. Sin embargo, dos reuniones sucedidas en la Casa de Gobierno son clave, para Soria, Frederic y Marcó del Pont, para entender cómo se desencadenó el tráfico de municiones hacia Bolivia. “La decisión de enviar el material represivo a Bolivia para apoyar el golpe de Estado se tomó en la Casa Rosada”, insisten los tres funcionarios.
La primera reunión
Faurie entró a la Casa Rosada a las 10:42 del 12 de noviembre de 2019. Se encaminó hacia el despacho de Macri y mantuvo con él una reunión que se extendió unos 40 minutos. El entonces canciller salió de la Casa de Gobierno a las 11:29. En el mismo horario de la visita de Faurie estaban en la Rosada varios hombres de confianza de Macri: Peña, Pompeo y el mismísimo Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, actualmente prófugo en la causa por las presiones a los dueños del Grupo Indalo.
Ese mismo 12 de noviembre, Faurie les envió una nota a Patricia Bullrich y a Oscar Aguad para pedirles que enviaran una comitiva para garantizar la seguridad de la embajada y de la residencia. Hay dos curiosidades que rodean a la carta de Faurie:
- Para el 12 de noviembre, ya se sabía que iría un contingente de gendarmes a La Paz. Un día antes, la Gendarmería había hecho los trámites ante la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC) para sacar el armamento y el embajador Normando Álvarez García, que dependía de Faurie, ya había tramitado la autorización para el ingreso de los gendarmes en Bolivia.
- Faurie se cuidó de no subir la carta al sistema electrónico que usa la administración pública desde 2016.
“La orden de escribir esa nota-coartada, está claro, fue dada personalmente por Macri a Faurie”, sostuvieron Soria, Frederic y Marcó del Pont en la ampliación de la denuncia.
La segunda reunión
Bullrich entró a la Casa de Gobierno a las 11:39, exactamente diez minutos después de que salió Faurie. Ella fue, en cambio, al despacho de Peña. Allí se congregaron todos los funcionarios de su cartera junto con los jefes de las cuatro fuerzas de seguridad. Estaba Gerardo Otero, comandante general de la Gendarmería, en la que fue su primera visita en el año a la Rosada. El encuentro duró, al menos, hasta las 13:48, cuando se Bullrich se retiró de Casa de Gobierno. Soria, Frederic y Marcó del Pont no descartan que Macri haya participado del encuentro porque tenía su despacho contiguo al de Peña.
Después de la reunión se encadenan una serie de hechos que terminan con el despegue del Hércules hacia Bolivia:
- A las 12:51, en plena reunión, ingresó el ayudante de Otero, Ramón Domínguez, y se encaminó hacia donde estaba su jefe.
- Exactamente quince minutos después, la Gendarmería pidió a la ANMaC llevar un “complemento” del armamento que ya había solicitado sacar el día anterior. Ahora pedía autorización para las 70.000 balas que se repartieron en Bolivia. Todas esas balas habían sido compradas por Bullrich para la cumbre del G20.
- A la hora de que Bullrich sale de Casa Rosada, el jefe del Grupo Alacrán de Gendarmería mandó un fax a la Fuerza Aérea para avisar que llevarían ese adicional de 70.000 balas, granadas y sprays.
El avión despegó a las 23.40 del aeropuerto de El Palomar. Las 70.000 balas no fueron declaradas en el manifiesto de carga. La FAB recibió 40.000 balas en el hangar del aeropuerto de El Alto, donde estaba estacionado el Hércules Argentino en la madrugada del 13 de noviembre de 2019. A la Policía Boliviana le entregaron 26.900 balas en la residencia argentina cuando terminó de escoltar al grupo de gendarmes que acababa de llegar al país. Después, como reveló este diario, Otero mandó un sobre cerrado al jefe de la Policía de Bolivia a través de la embajada de ese Estado en la Argentina. Es probable que en esa nota estén los detalles de cómo se orquestó el envío para los golpistas.
Macri ya está imputado en la causa por contrabando agravado, al igual que Bullrich, Aguad, Álvarez García y Otero. Además del jefe de la Gendarmería, hay tres otros efectivos que están siendo investigados: el exdirector de Logística Rubén Yavorski (que tramitó la salida de las municiones), el exdirector de Operaciones Carlos Miguel Recalde y el exagregado en La Paz Adolfo Caliba. El gendarme Caliba es señalado por el gobierno de Bolivia como el enlace con la policía de ese Estado y como quien gestionó la entrega del material represivo a esa fuerza.
PUBLICACION ORIGINAL DE PAGINA 12 AQUI: https://www.pagina12.com.ar/362536-armas-a-bolivia-el-gobierno-amplio-la-denuncia-contra-macri-
El Gobierno consideró probada la participación de Macri en el golpe de Estado en Bolivia en 2019
Mediante un escrito firmado por los ministros de Seguridad y de Justicia y la titular de la AFIP se sumaron pruebas de que el contrabando de armas fue “decidido y coordinado” por el expresidente. Se agrava la situación de Patricia Bullrich, Oscar Aguad y Gerardo Otero y se incorporaron imputaciones contra Marcos Peña, Jorge Faurie y Fulvio Pompeo.
TELAM, BUENOS AIRES.- El Gobierno consideró probada la participación del expresidente Mauricio Macri en el golpe de Estado cometido contra Evo Morales en Bolivia en 2019 y amplió su denuncia ante la Justicia con la presentación de documentos y registros oficiales sobre reuniones mantenidas en la Casa Rosada por funcionarios de Cambiemos en los días que se gestionó el traslado ilegal de armamento al país vecino, atravesado por una forzada crisis institucional.
“Los documentos oficiales encontrados en las últimas semanas dan cuenta de hechos que refuerzan lo oportunamente denunciado: fue Mauricio Macri, el expresidente de la Nación, quien ordenó y organizó en forma directa la maniobra de contrabando”, sostuvo el escrito firmado por la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic; la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont; y el Ministro de Justicia, Martín Soria, según el texto al que tuvo acceso Télam.
En su presentación, el Gobierno amplió la presunta responsabilidad a tres actores de la gestión macrista: el exjefe de Gabinete Marcos Peña; el exsecretario de Asuntos Estratégicos de la Nación Fulvio Pompeo (no estaban en la denuncia inicial) y el excanciller Jorge Faurie, por entender que la nueva información aportada “agrava” la situación de los tres.
El escrito da cuenta, en alusión a Peña y Pompeo, que “el ministro coordinador y su secretario de confianza, especialista en política internacional, no solo participaron en reuniones que evidencian su rol central en la organización del contrabando, sino que también intervinieron directamente en el trámite mediante el cual se gestionó el traslado de los gendarmes a Bolivia, ocultando la verdadera finalidad de ese viaje”.
“Lo que hasta hoy eran inferencias prácticamente irrefutables, ahora se confirma con pruebas directas: el contrabando de armas a Bolivia fue decidido y coordinado por Macri, quien utilizó la Casa Rosada para organizar esta maniobra en apoyo al golpe de estado en Bolivia”, agregó la presentación.
Los denunciantes aseguraron que, con las nuevas pruebas entregadas a la Justicia, “se profundiza el caudal probatorio que pesa sobre Patricia Bullrich, Oscar Aguad y Gerardo Otero”, ya imputados en el expediente, al igual que Macri.
En diálogo con El Destape Radio, Soria reseñó que el envío de armamento, granadas y municiones a Bolivia fue descubierto en los registros “el mismo día en que se concretaba el golpe de Estado” en Bolivia y agregó que también “el mismo día del golpe, el gobierno de Macri mantenía en horas de la mañana una reunión en Casa Rosada” con varios miembros del gabinete.
“Primero, Macri con el canciller Faurie y más tarde, en el despacho de Marcos Peña. Allí se juntaba Bullrich con todos los jefes de todas las fuerzas dependientes del Ministerio de Seguridad”, indicó Soria y contó que también asistió a ese encuentro “el titular de Gendarmería, el organismo del cual salieron las 70 mil municiones y más de 600 granadas de gas que fueron contrabandeadas”.
Un comunicado del Ministerio de Justicia consideró que “con la inclusión del nuevo material probatorio, se demuestra que las más altas autoridades políticas del gobierno macrista sostuvieron encuentros con los funcionarios de menor rango que instrumentalizaron el contrabando ilegal, horas antes de que despegue el avión militar con el cargamento ilegal con destino a Bolivia”.
“A partir de hoy, podemos saber casi al detalle cómo fue el paso a paso de la decisión y los trámites que derivaron en el envío de material represivo a las fuerzas golpistas de un país hermano”, sostiene la ampliación de la denuncia, que incorpora además un detalle cronológico de los hechos y un pedido de nuevas medidas de prueba.
La denuncia sumó registros de ingresos a la Casa Rosada el 12 de noviembre de 2019, horas antes de la partida del vuelo con el cargamento de más de 600 granadas y 70.000 municiones a Bolivia
De esta forma, la denuncia sumó registros de ingresos a la Casa Rosada el 12 de noviembre de 2019, horas antes de la partida del vuelo con el cargamento de más de 600 granadas y 70.000 municiones a Bolivia.
“Ese fue un día fundamental para los que diseñaron la maniobra ilícita, objeto de esta investigación”, remarcaron los denunciantes.
Durante esa mañana, Gendarmería “hizo los trámites para ampliar las autorizaciones de salida del país otorgadas por la Anmac” un día antes, con el objetivo de proteger la Embajada argentina en Bolivia.
El nuevo material incorporado el día 12 consistía en 70.000 municiones 12/70 AT y en centenares de granadas de gas HC, 2CN y CS; es decir, el mismo material que luego fue entregado a la Policía y a la Fuerza Aérea Boliviana”, se detalló
“A última hora de la noche, por su parte, partió rumbo a Bolivia el Hércules C-130 que trasladó a los gendarmes y al material represivo” consignó la presentación.
Ese 12 de noviembre, Macri tuvo dos reuniones que los denunciantes consideraron “trascendentales” para la maniobra de contrabando agravado que se investiga.
Una de ellas fue con Peña, Bullrich, el entonces director de Gendarmería Gerardo Otero y su secretario privado y directores de todas las fuerzas de seguridad.
Poco antes, Macri se había reunido con el entonces canciller Faurie, quien luego solicitó por nota el envío de gendarmes a Bolivia con el supuesto fin de dar protección a la Embajada argentina.
“Faurie no solo se reunió en privado con Macri, sino que además firmó –de puño y letra– una sospechosa nota, hasta ahora desconocida. Omitiendo utilizar el sistema electrónico y obligatorio de comunicaciones oficiales”, se puntualizó.
Soria ratificó que está “comprobada” la participación de Macri y de “gran parte de su gabinete” en el golpe de Estado en Bolivia, a partir de “registros oficiales” incorporados a la causa.
El ministro explicó que la ampliación de la denuncia fue decidida para aportar documentación “que da cuenta de la participación de Macri, (Patricia) Bullrich, (Oscar) Aguad, (Jorge) Faurie, (Fluvio) Pompeo y Marcos Peña en el golpe contra Evo Morales, que tenía mandatado hasta 2020 y lo derrocaron en el 2019”.
La causa es investigada en el fuero penal económico e interviene el fiscal Claudio Navas Rial, quien ante la ampliación de la denuncia deberá resolver si formula nuevas imputaciones.
La ampliación de la denuncia se presentó ante el juez en lo penal económico Alejandro Catania, quien por el momento está a cargo del caso, aunque debe resolverse un conflicto de competencia con su par Javier López Biscayart.
Gobierno amplía su denuncia por contrabando a Bolivia y pide que se impute a Peña, Faurie y Pompeo
La denuncia apunta contra Mauricio Macri, Marcos Peña y funcionarios de la gestión Cambiemos por el envío de armas en forma ilegal para apoyar el golpe de Estado contra Evo Morales.
Los denunciantes incorporaron al expediente los registros de ingreso a la Casa Rosada del 12 de noviembre de 2019, que “evidencian que la decisión de enviar material represivo a Bolivia para apoyar el golpe de Estado se tomó en la Casa Rosada”. Los registros dan cuenta que, horas antes de la partida del vuelo con el cargamento ilegal de armas y municiones con destino a Bolivia, Macri mantuvo dos reuniones trascendentales.
La primera coincide con un momento clave del contrabando. Según surge de las notas firmadas el 12 de noviembre por el gendarme Rubén Yavorsky, (uno de los imputados) el trámite para el envío de las 70.000 municiones y las más de 600 granadas contrabandeadas fue iniciado por Gendarmería a las 13:06 de ese día. En ese momento, Macri, Peña, Bullrich, el director de Gendarmería Gerardo Otero y su secretario privado estaban reunidos, junto a los directores de todas las fuerzas de seguridad, en el despacho de Peña.
La presencia de Otero, superior de Yavorsky, y de su secretario privado en ese cónclave en Casa Rosada acredita que la orden de enviar ese material fue tomada directamente por las máximas autoridades del Gobierno de Mauricio Macri.
Además, esa reunión, que tuvo lugar apenas 12 horas antes de que los gendarmes partieran rumbo a Bolivia en el Hércules C-130, tuvo otras particularidades: se llevó a cabo en el despacho de Peña, el único con acceso directo al despacho presidencial, y fue el primer ingreso de Otero a Casa Rosada en todo 2019, según la denuncia.
Pero hubo otro encuentro clave. Minutos antes de la reunión en Casa Rosada entre el director de Gendarmería y los ministros de Macri, el expresidente se reunió con Faurie. Este dato cobra relevancia, ya que Faurie, luego de esa reunión, intervino en la maniobra con un aporte fundamental: formalizar, a través de una nota oficial, la excusa utilizada para “encubrir la verdadera finalidad del material enviado, que era entregarlo a las fuerzas golpistas del vecino país”. Dice la denuncia que mediante esa nota, dirigida a Bullrich y Oscar Aguad, el excanciller “solicitó” el envío de gendarmes a Bolivia, con el supuesto fin de proteger la Embajada. La nota fue firmada el mismo 12 de noviembre, cuando el trámite para la salida de los gendarmes y del armamento ya había sido realizado el día anterior. “Sospechosamente”, Faurie evitó utilizar el sistema electrónico de comunicaciones oficiales (Gestión Documental Electrónica), obligatorio desde el 2016 (por la Resolución Nº 65/2016 del Ministerio de Modernización).
Para el Gobierno, con la inclusión del nuevo material probatorio, se demuestra que las más altas autoridades políticas -el Presidente, el jefe de Gabinete, el canciller y la ministra de Seguridad- sostuvieron encuentros con los funcionarios de menor rango que instrumentalizaron el contrabando ilegal, horas antes de que despegue el avión militar con el cargamento ilegal con destino a Bolivia. Respecto de Pompeo, se aportó documento que evidencia su intervención en el expediente por el cual Bullrich tramitó la salida del país de los gendarmes.
La denuncia la tiene delegada el fiscal del fuero Penal Económico Claudio, Navas Rial, pero está sumida en un conflicto por la competencia en relación al juzgado que debe intervenir. El juez Javier Lopez Biscayart se declaró incompetente y la pasó a su par Alejandro Catania, quien tenía una denuncia anterior. Pero este último consideró que la de Lopez Biscayart (donde está la presentación del Gobierno) estaba más avanzada y se la envió. Aún no hay una decisión final.
PUBLICACION ORIGINAL DE AMBITO, AQUI: https://www.ambito.com/politica/bolivia/gobierno-amplia-su-denuncia-contrabando-y-pide-que-se-impute-pena-faurie-y-pompeo-n5255132