Grupo ligado al magnicidio en Haití intentó matar a Luis Arce en 2020

AHORA EL PUEBLO.- Entre el 16 y el 23 de octubre de 2020 permanecieron en Bolivia mercenarios y paramilitares contactados por el exministro de Defensa Luis Fernando López para acabar con la vida del entonces candidato presidencial Luis Arce.

“En época de campaña electoral, el 16 de octubre de 2020, ingresaron estas personas al territorio nacional, cuando estábamos en plena campaña. Como Movimiento Al Socialismo (MAS) teníamos información de grupos de Inteligencia, y estas personas lograron identificar que se estaba gestando un plan desestabilizador para evitar que Luis Arce asuma el poder en caso de ganar las elecciones (18 de octubre).

Dos días antes de los comicios estas personas estaban en territorio nacional y se retiraron dos días después”, detalló ayer en conferencia de prensa el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.

LOS CONTACTOS

Del Castillo presentó el audio de una conversación telefónica entre Luis Fernando López y Joe Pereira, quien era administrador civil en el Ejército de Estados Unidos, y un traductor de nombre Luis Suárez, un ciudadano boliviano que actúa con el alias de ‘Cyber Rambo’. En esa charla se escucha la intención de López de desconocer la voluntad del pueblo en las urnas de 2020 con la victoria de Luis Arce, como lo hicieron otros opositores en 2019 con Evo Morales.

En junio de este año se conoció que esos mercenarios y paramilitares serían contratados mediante empresas tercializadas para acciones violentas en el país, aunque se harían pasar por contratistas privados sin representación del Estado norteamericano. Ese acuerdo fue aceptado por López.

“Tenemos a Luis Fernando López, que fue parte del régimen de Jeanine Añez como cuota de poder de Luis Fernando Camacho; y del otro lado a JEP (Joe Pereira), quien nació en La Paz hace 51 años y fue apresado en Palmasola en noviembre de 2018 por varios delitos, y al encontrar estos audios en su poder fue enviado a Chonchocoro”, dijo Del Castillo.

LAS IDENTIDADES

Mediante correos electrónicos y uso de tecnología en inteligencia e investigación se accedió a los nombres de las empresas y contratos con esos hombres, además se conoció las identidades de algunos paramilitares que López quería traer a Bolivia.

Con el uso del nombre ‘Susan Peterson’, Joe Pereira se contactó con los paramilitares y expuso a diferentes empresas su interés de contratar sus servicios.

El ministro Del Castillo mostró el currículum de Sam Brown, un operador de rifle y entrenado en la infantería de Estados Unidos. Ernest H. DeLong, contratado por empresas internacionales de servicio de guerra y que estuvo en Irak con el Ejército norteamericano. Davion Covell, de quien se dice que es competente además que está certificado en el uso de armas de fuego, bombas y explosivos, y que fue distinguido por sus servicios en Afganistán.

“Éstos son los paramilitares que López pretendía introducir al país para provocar luto y muerte. Tuvimos acceso a que Joe Pereira esperaba contar con más de 300 sicarios, aunque en el audio tenían planificación para más de 10 mil hombres de ser necesario”, agregó.

LOS CONTRATOS

Según el modelo de carta de intenciones y de contrato a suscribir entre Joe Pereira (Susan Peterson), se establece la tasa de pago de rango de $us 125 mil por año, más bonificaciones que pueden ser hasta el 45% de su compensación del rango base.

“La empresa es responsable de usted mientras se encuentre en el país, por lo que le reembolsa todos los costos y gastos asociados aprobados por escrito. Asimismo, recibirá bonificaciones mensuales adicionales por el monto directo del costo total de su paquete de beneficios que incluye seguro de salud, vida, peligro, desmembramiento y seguro dental”, detalla.

Según el titular de Gobierno, la gente que contactó López coordinaba con empresas internacionales de sicarios con experiencia en varios países del mundo.

De igual manera, en los contratos también se establecieron equipamientos que se deberían proporcionar a los sicarios y paramilitares para su cometido.

“El cliente proporcionará al contratista los siguientes artículos relacionados con el trabajo, como vehículos en muy buen estado, equipo (rifle Heckler y Koch 416, Sig Sauer 226 o Glock 17 con óptica completa) en muy buen estado, y otros materiales como el kit SFLCS completo, IFAK y/u otros utilizados para proporcionar los servicios requeridos por este acuerdo”.

LA PROTECCIÓN DE LUIS ARCE

Con la información sobre la presencia de sicarios para asesinar al presidenciable Luis Arce, se extremó su seguridad para que no le pase nada durante la campaña en las elecciones y cuando debía jurar a su nuevo cargo.

“Durante los últimos días de campaña, como MAS creamos una cápsula de seguridad alrededor de Arce y tomamos todas las medidas extremas de protección como su no exposición en lugares abiertos o donde haya multitudes. Sabíamos de la presencia de los grupos armados, entonces sus apariciones fueron en lugares cerrados y controlados”, detalló.

Cuando Arce ya tenía que jurar como presidente (8 de noviembre de 2020) fueron emplazados diversos anillos de seguridad, tanto en la plaza Murillo como en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) porque no se descartaba que en uno de esos actos se podría atentar contra su vida.

“Queda claro que en Bolivia hubo intento de desestabilizar al país con un plan para que Luis Arce no asuma el mando emanado por las urnas e intento de magnicidio. Luis Fernando López, quien fue parte de la cuota de poder de Luis Fernando Camacho, tuvo contactos constantes con estos grupos irregulares mediante empresas tercializadoras con experiencias en combate”, manifestó el Ministro.

La autoridad instó a los sectores opositores a dejar de planificar estas arremetidas contra el gobierno de Arce, principalmente para desestabilizar, por ello adelantó que se extremará el uso de las fuerzas para resguardar el orden y la vida.

LA RELACIÓN CON EL CRIMEN DEL MANDATARIO DE HAITÍ JOVENEL MOÏSE

Durante la campaña electoral del MAS, en 2020, ingresó a Bolivia Germán Alejandro Rivera García, uno de los mercenarios involucrados en la muerte del presidente de Haití Jovenel Moïse el 7 de julio de 2021 en Puerto Príncipe.

El presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue asesinado el 7 de julio por mercenarios.

Rivera aceptó haber participado en el asesinato al Presidente de Haití, y llegó a Bolivia dos días antes de los comicios de 2020.

Entre el 16 y 19 de octubre ingresaron Arcángel Pretel Ortiz, Antonio Intriago, Ronald Alexander Ramírez Salamanca, exintegrante de la policía colombiana y con un largo recorrido en viajes constantes a Haití, y Enrico Galindo Arias.

“Días antes de las elecciones, paramilitares que después matarían al presidente de Haití y contratistas de mercenarios como Arcángel Pretel y Antonio Intriago estuvieron en el país con —según la información que obtuvimos— intención de atentar contra la vida de Luis Arce” informó el Ministro de Gobierno.

Se hospedaron en el hotel Presidente (La Paz) junto a Enrico Galindo y Ronal Ramírez.

También llegaron al hotel Marriot de Santa Cruz en citas con autoridades del régimen de Añez.

Los extranjeros se fueron el 22 y 23 de octubre luego de las elecciones, unos rumbo a Colombia y otros a Estados Unidos.

COMPAÑÍAS FICTICIAS DISFRAZAN CONTRATOS CON LOS EXTRANJEROS

Según la conversación entre Joe Pereira y López, el traductor (‘Ciber Rambo’) le dice que “se necesitaba que tres aviones C-130 vayan al aeropuerto de El Trompillo (Santa Cruz) para recoger las tropas de una base de Miami dedicada al Comando Sur.

“La manera en que esto funcione es que se va a recoger estas tropas  como si fueran contratistas privados, bajo ninguna representación del Estado norteamericano. Para el momento en que los C-130 aterricen en Miami, los contratos van a estar escritos y firmados”, y López le responde: ¡Perfecto!

125 mil dólares por año, más bonificaciones, sería el pago para cada mercenario.

“Los vamos a poner en contratos (a los mercenarios) para compañías que ya están trabajando en Bolivia. Son compañías que van a disfrazar el contrato con el personal militar”, y López le responde: ¡Excelente!

El traductor le remarca que se pueden conseguir hasta 10 mil hombres sin ningún problema, aunque expresa su duda de que se necesite esa cantidad.

“Es un gran dato”, le manifiesta Luis Fernando López Julio.

Según los planes, los 10 mil mercenarios se unirían con militares y policías bolivianos, considerados por López como patriotas, y que estaban en contra de que Luis Arce sea el nuevo presidente.

“El Alto Mando Militar ya está en conversaciones de apronte. ¿Cuál es el tema? Yo quiero ser bien específico. El mensaje de la lucha está en que quieren reemplazar las fuerzas armadas bolivianas y la Policía por milicias cubanas y venezolanas. Ésa es la punta del hilo, es lo que va a permitir que Bolivia se levante nuevamente y no permita el gobierno de Arce. Ésa es la realidad”, dice López.

Luego el traductor le consulta, “como boliviano”, ¿cuán dispuestos están a hacer operaciones psicológicas y a manipular la información?”, a lo que López le responde: “Cien por ciento”.

El MAS exige a la Fiscalía dar con autores del intento de asesinato

Parlamentarios del Movimiento Al Socialismo (MAS) exigen que la Fiscalía General del Estado actúe inmediatamente de oficio e inicie un proceso investigativo para saber quiénes fueron los autores y quiénes financiaron el intento de asesinato de Luis Arce en 2020, ahora presidente de Bolivia.

El ministro de Gobierno, Carlos Eduardo del Castillo, aseguró ayer que paramilitares llegaron al país dos días antes de las elecciones de 2020 para atentar contra la vida del candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS) Luis Arce, y se quedaron hasta dos días después de esa jornada. En un audio se escucha al exministro de Defensa Fernando López.

El diputado Ányelo Céspedes expresó su preocupación por la persistencia del gobierno de facto de Añez y de la derecha para quedarse en el poder, pues trajo paramilitares para asesinar a un presidente legalmente elegido por el pueblo boliviano.

“No pensé que la derecha fascista hubiera sido capaz de matar a nuestros mismos bolivianos para quedase en el poder. Con la denuncia que hizo el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, la Fiscalía debe empezar de oficio el proceso investigativo para llegar a la verdad de los hechos”, dijo.

Fernando López, el exministro de Defensa del gobierno de facto de Jeanine Añez.

El diputado Juan José Jáuregui indicó que estos nuevos hechos que se acaban de conocer demuestran con claridad el tipo de autoridades que había en el gobierno de facto de Jeanine Añez. Dijo que algunos aún buscan generar convulsión en el país con mentiras.

“La justicia debe actuar de inmediato porque como bolivianos no podemos permitir que se atente nuevamente contra la democracia. Estas exautoridades están acostumbradas por su casta política a aprovecharse de la situación y tomar protagonismo para convulsionar el país y destruir todo lo que hasta ahora hizo el Gobierno nacional”, afirmó.

El viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, Jorge Silva, mostró su inquietud por el intento de magnicidio contra el presidente Luis Arce en 2020. Señaló que el gobierno del régimen golpista de Añez no tuvo límites a la hora de planificar el ingreso de mercenarios al país para matar a un presidente como Luis Arce para quedarse en el Gobierno.

“La corriente política opositora del Gobierno no tiene límites, no los tuvo en 2019 con el golpe de Estado; al parecer, hoy están también en este otro escenario, incluso de atentar contra el presidente (Luis) Arce”, expresó.

El diputado por Comunidad Ciudadana Alberto Astorga dijo que la denuncia que presentó el ministro de Gobierno, respecto al intento de magnicidio al presidente Luis Arce Catacora, es una cortina de humo para desviar la atención de la opinión pública y evitar que se derogue la Ley 1386.

El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, calificó de irresponsable y de “un show” la denuncia de intento de magnicidio que emitió el Ministro de Gobierno. Dijo que sólo busca protagonismo y victimizar al presidente Luis Arce.

Camacho negó que el exministro de Defensa Fernando López, sindicado como el que tuvo contactos con los mercenarios, haya sido su cuota de poder en el gobierno de Jeanine Añez, aclaró que sólo fue el canal de los nombres propuestos por los sectores para conformar el gabinete de Añez.

Michel revela anteriores atentados

El exvocero del MAS-IPSP Sebastián Michel dijo que en 2020 el entonces presidente electo de Bolivia, Luis Arce, salió ileso de un atentado con dinamita y reveló la estrategia seguida al conocer preparativos de un segundo golpe de Estado organizado por un ministro de Jeanine Añez.

Indicó también que la policía acorraló entonces a los dirigentes del MAS en su casa de campaña, al parecer con el objetivo de apresarlos. Sin embargo, los uniformados se retiraron luego de conocer la victoria electoral con un contundente apoyo del 55,11% a Luis Arce y David Choquehuanca.

El exvocero recordó que el 5 de noviembre de 2020 hubo un atentado con explosivo en la casa de campaña del MAS en La Paz.

Habrían estado involucrados los responsables de la muerte del mandatario haitiano Jovenel Moise

Bolivia denunció un intento de magnicidio contra el presidente Luis Arce en 2020

El ministro de Gobierno Eduardo del Castillo dio detalles de los movimientos del grupo de sicarios y paramilitares venezolanos y colombianos en los días previos y posteriores a las elecciones del 18 de octubre del año pasado.

Por Guido Vassallo/ PAGINA 12/ Buenos Aires.-
 (Fuente: Télam)
. Imagen: Télam

El ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, denunció un intento de magnicidio contra el presidente Luis Arce en el que habrían estado involucrados los responsables de la muerte del mandatario de Haití, Jovenel Moise. El supuesto plan encabezado por el exministro de Defensa actualmente prófugo, Luis Fernando López, fue revelado este lunes por el ministro del Castillo, quien presentó un informe que detalla ingresos, movimientos y reuniones del grupo de sicarios y paramilitares en los días previos y posteriores a las elecciones del 18 de octubre de 2020. Además de coincidir con el primer aniversario del triunfo de Arce en las urnas, la explosiva revelación llega en un momento de alta tensión entre el oficialismo y la oposición, decidida a marcar el terreno con marchas y paros cívicos.

Intento de magnicidio

Existió un intento de desestabilizar el país mediante un plan elaborado para no dejar a nuestro candidato y actual presidente Luis Arce Catacora asumir el mando emanado de las urnas: en Bolivia hubo un intento de magnicidio“, manifestó del Castillo en una rueda de prensa en La Paz. El ministro ofreció detalles de la fallida operación tomando como base una serie de audios y documentos en los que supuestamente Luis Fernando López, exministro de Defensa del gobierno de facto de Jeanine Áñez, realizó gestiones con empresas extranjeras “para traer sicarios y paramilitares” colombianos y venezolanos a Bolivia.

“Las llamadas telefónicas y los correos electrónicos filtrados, en donde se discute el despliegue masivo de mercenarios durante las elecciones, revelan que Bolivia pudo haber visto un nuevo derramamiento de sangre en 2020“, aseguró del Castillo. En junio de este año, una investigación de la revista estadounidense The Intercept reveló que Bolivia estuvo al borde de un golpe de Estado similar al perpetrado en 2019 contra Evo Morales.

La conexión con Haití

Del Castillo recordó que la policía de Haití logró detener a 21 personas involucradas en el magnicidio del presidente Moise. Entre ellas destacó a un excapitán del ejército colombiano, identificado como German Alejandro Rivera García. Según el ministro de Gobierno, Rivera García alias “Mike” fue el líder de los mercenarios que terminaron con la vida de Moise y, una vez capturado, “aceptó su responsabilidad”.

De acuerdo con la investigación presentada por el ministerio de Gobierno, Mike ingresó a Bolivia con el pasaporte número AV 969623 por la ruta Colombia-Viru Viru, el 16 de octubre de 2020. En el fallido atentado contra Arce también se menciona, entre otros, al venezolano Antonio Emanuel Intriago Valera, ferviente opositor del gobierno de Nicolás Maduro y responsable de la firma CTU Security de Miami, señalada por haber contratado a los mercenarios que ejecutaron a Moise.

Los movimientos en Bolivia

Del Castillo explicó que al menos cinco sicarios se hospedaron en el Hotel Presidente de La Paz. El dato no es menor ya que dicho hotel se encuentra muy cerca de la plaza Murillo, donde se produjo la toma de posesión del presidente Arce. Miembros del MAS decidieron hospedarse en el mismo lugar, donde confirmaron la presencia de los ciudadanos extranjeros que abandonaron el país el 22 y 23 de octubre luego de las elecciones, unos rumbo a Colombia y otros rumbo a Estados Unidos.

Ante esa situación, durante la campaña y después de la contundente victoria del 18 de octubre, el MAS decidió proteger a Arce aplicando una aceitada estrategia de seguridad. “Si ustedes pueden revisar los distintos medios de comunicación, verán que nuestro presidente y excandidato no tenía apariciones públicas en lugares abiertos, porque teníamos conocimiento de estos grupos armados que ya se encontraban dentro del territorio nacional“, aseguró el ministro Del Castillo.

El contenido del audio

En la extensa nota de The Intercept se mencionan varios audios, pero este lunes el ministro Del Castillo solo mencionó uno. En el mismo se da, aparentemente, una conversación entre el exministro de Defensa Luis Fernando López y J.E.P., a quien la revista estadounidense identifica como Joe Pereira, un exadministrador civil del Ejército norteamericano que actualmente se encuentra detenido en el penal de Chonchocoro por el delito de estafa agravada, de acuerdo al diario La Razón.

Además de López y Pereira, se suma a la comunicación un tercero que oficia como traductor, identificado como Luis Suárez. Se trata de un exsargento boliviano nacionalizado estadounidense, conocido por haber promovido una agresiva campaña en Twitter contra Evo Morales durante la crisis política y social de 2019. Suárez es más conocido en Bolivia como “Cyber Rambo”, y en sus redes sociales se jactó de poder hacer más con un solo clic que “todo el esfuerzo de la izquierda”.

En la conversación que reveló del Castillo, la persona identificada como J.E.P. pide coordinar con el comandante de más alto rango de la policía para que los tres aviones Hércules) C-130 que posee Bolivia “recojan tropas de la base del Comando Sur” situada en Miami. “El señor ministro (por López) va a recoger a las tropas como si fueran contratistas privados, bajo ninguna representación del Estado norteamericano”, detalla.

J.E.P. alardea con que puede “conseguir hasta diez mil hombres para llevar a cabo la operación”, aunque no cree que sea necesario. Sobre el final del audio, se escucha la voz que respondería al exministro López: “Quiero ser bien específico, el mensaje de la lucha está en que quieren reemplazar a las fuerzas armadas bolivianas y la policía por milicias cubanas y venezolanas. Esa es la punta del hilo, es lo que va a permitir que realmente Bolivia se levante nuevamente y no permita el gobierno de Arce“. Por aquellos días no se vivía la violencia de 2019 y la derecha lucía bastante debilitada, pero las intentonas golpistas no parecían detenerse.

Del Castillo reveló que los involucrados en el operativo tenían “un contrato anual inicial de 125 mil dólares estadounidenses”, aunque el plan finalmente no se ejecutó. En otra de las partes del documento, se señala que “el cliente proporcionará al contratista artículos tales como rifles Hecker y Koch 416, y (pistolas) Sig Sauer 226 y Glock 17 con óptica completa”.

En su informe, The Intercept indicó que los desacuerdos entre los ministros de la gestión interina de Áñez y la división dentro de las fuerzas armadas, potenciada por la abultada victoria de Arce, habrían desbaratado el plan. Sin embargo, subyacen varias dudas. Página/12 intentó comunicarse sin éxito con el ministro Eduardo del Castillo, aunque su entorno respondió que el gobierno acudirá a la justicia en los próximas horas para intentar esclarecer los hechos y saber por qué los mercenarios retrocedieron en su cometido.

Por su parte, el presidente Luis Arce se refirió a la denuncia durante un acto en La Paz en el que confirmó que hace un año quisieron atentar contra su vida, aunque no tiene miedo. Para graficar su situación, el mandatario recurrió a una frase del fallecido político y escritor Marcelo Quiroga Santa Cruz en sus tiempos de diputado socialista: “Jamás vamos a rehuir el peligro, porque mucho más temible que ese enemigo que está buscando la manera de anularnos es una conciencia culpable, y no podríamos soportarnos a nosotros mismos si no cumpliéramos nuestro deber“.