Investigan al grupo parapolicial RJC que sembró terror durante el régimen de Añez

LA ZURDA, radio.- El viceministro de Régimen Interior y Policía, Nelson Cox, lamentó la decisión judicial de otorgar detención domiciliaria a dos cabecillas de la organización delincuencial Resistencia Juvenil Cochala (RJC), dijo que no se permitirá su rearticulación y señaló que está en curso una investigación sobre los financiadores de ese grupo parapolicial.

La autoridad, entrevistada en el programa “Contragolpe”, de radio Patria Nueva, dijo que la UJC fue el brazo armado del golpe de Estado de 2019 y fue responsable de hechos de violencia, agresiones, golpizas, persecuciones a indígenas que se movilizaron contra el régimen de facto.

“Lamento mucho que no se haga una buena valoración dentro del sistema penal”, dijo Cox, quien añadió que “nos deja mucho que pensar que un juez cautelar, de la forma más irresponsable, se olvide de todo lo que han degenerado en la sociedad (la RJC)” y el racismo y violencia con la que actuaron, señala ABI.

“Una de sus víctimas hasta perdió un ojo. Ellos desplegaron amedrentamiento constante, eran dueños de la ciudad”, agregó.

La autoridad, en cumplimiento a recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), indicó que no se permitirá la rearticulación de esa organización criminal y que en la actualidad se realizan investigaciones respecto a los financiadores de ese tipo de agrupaciones ilícitas.

Cox recordó que la RJC se convirtió en el brazo armado parapolicial y paramilitar de Arturo Murillo y Jeanine Áñez.

Por otro lado, indicó que las unidades de investigación policial tienen individualizados al menos a 20 uniformados que se amotinaron en 2019 en franca vulneración a las normas legales vigentes.

Investigan a financiadores de la Resistencia Juvenil Cochala para evitar rearticulación de ese grupo delictivo