Arce pide fuerza y salud en el Año Nuevo Andino Amazónico Chaqueño 5529

AHORA, EL PUEBLO.- El presidente Luis Arce recibió los primeros rayos del sol del Año Nuevo Andino Amazónico Chaqueño 5529 en Tiwanaku, y le pidió a la Pachamama fuerza y salud para seguir avanzando en el proceso de cambio en beneficio del pueblo boliviano.

“Como nunca, necesitamos de todas las fuerzas, necesitamos y venimos con mucha fe a pedirle a nuestra Pachamama, a pedirle a nuestro Inti fuerza, salud para seguir avanzando”, dijo el Primer Mandatario.

La autoridad pidió que la economía boliviana y el proceso de cambio avancen sin contratiempos, por lo que solicitó a los jilakatas, achachilas y amautas su apoyo con la energía espiritual para lograr esos propósitos.

“Sabemos que hay que trabajar, no nos estamos cruzando de brazos, pero necesitamos siempre esta energía que nos va a venir de nuestro Inti”, remarcó.

Agregó que en 2020 fueron perseguidos, refugiados, detenidos, y familias lloraban de angustia. Pero los amautas el año pasado auguraron tiempos mejores para el país.

El vicepresidente David Choquehuanca señaló que el camino del Qhapaq Ñan lleva hacia la unidad, esperanza armonía, bienestar y respeto.

“Somos wiñay marka (pueblo eterno), Abya Yala (tierra de la eterna de la juventud). Estamos en Tiwanaku, tiwanakusaxa qhantxaniwa (Tiwanaku pronto brillará), nayraqataru satxapxañaniwa (pronto iremos más allá), wiphala sampisktanwa (estamos con nuestra wiphala), sarawinisktanwa (tenemos nuestro camino), akankasipktanwa sarawisaru sartxañataki (estamos aquí para seguir nuestro camino), tenemos nuestro Qhapaq Ñan, tenemos nuestro camino”, resaltó, según nota de prensa.

Agregó que se llegó al lugar sagrado para caminar con mucho respeto con el pueblo, ya que el lugar tiene un gran valor histórico y cultural.

Con las manos extendidas hacia el cielo, todos los asistentes recibieron los primeros rayos del sol que asomaron por el cerro Lloco Lloco (Tiwanaku) cerca de las 07.17, para recibir la energía del astro rey.

El templo de Kalasasaya fue el lugar donde se realizaron los actos principales de celebración. Se entregaron las ofrendas para pedir permiso a la Pachamama con las tradicionales wajtas (mesas), compuestas por dulces que representan cada uno de los deseos, coca, alcohol, vino, flores y sullus (fetos de llama disecados), que posteriormente son encendidos para ser consumidos por el fuego.

Los rituales se desarrollaron como muestra de agradecimiento a la Pachamama y al Tata Inti, y fueron acompañados por las ministras de la Presidencia, María Nela Prada; de Culturas, Sabina Orellana; los presidentes de las cámaras de Diputados y Senadores, Freddy Mamani y Andrónico Rodríguez, respectivamente; el canciller Rogelio Mayta; además del embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro; entre otras autoridades.

Guía de los ancestros

El presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, pidió ayer a los ancestros que guíen a Bolivia y a sus gobernantes para afrontar la pandemia por Covid-19.

“Estamos pidiendo específicamente enfrentar la pandemia, que es nuestra mayor preocupación. Hemos pedido absolutamente de todo corazón a nuestro padre sol, en este día tan importante, Año Nuevo Aymara, en el solsticio. Con mucho orgullo (puedo decir que) son 5529 años y no es poco, es mucho para nuestra cultura”, dijo Mamani en contacto con los periodistas.

Reactivación de la economía

El ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Édgar Montaño, aprovechó para pedir trabajo y salud para todos los bolivianos, desde San Francisco de Urqhurani, en el municipio de Puerto Acosta en La Paz.

“Estamos aquí presentes para rendir cuentas a nuestro Tata Inti, estamos en este cerro tan ancestral para pedir por nuestra Bolivia, para que se reactive su economía y que Puerto Acosta siga adelante con sus tradiciones, que siga aportando a la cultura”, dijo Montaño.

Añadió que el Tata Inti será quien alumbre el camino para salir adelante y avanzar en la recuperación de los derechos de los pueblos indígenas.

El ministro de Justicia y Transparencia Institucional, Iván Lima, que participó en la celebración en la zona Faro Murillo de La Paz, conmemoró la fiesta señalando el orgullo de los bolivianos hacia sus raíces y enseñanzas de los antepasados.

De la misma forma, el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, Jorge Silva, pidió que sea un año productivo para los agricultores, de quienes dijo que dependerá la economía y seguridad alimentaria de los bolivianos.

“Principalmente, el retorno del sol, el nuevo ciclo agrícola, esperando que este Nuevo Año Andino Amazónico y del Chaco pueda significar mejores días para la familia boliviana”, sostuvo la autoridad.

La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, indicó la importancia de celebrar la cultura y tradiciones bolivianas.

“Para nosotros es muy importante ser parte de nuestras tradiciones, de nuestra cultura, de esa energía que recibimos en este nuevo año, estamos pidiendo salud, reconstruir nuestra economía en este lugar que tiene mucha energía”, manifestó en el acto.

En el municipio de Curva, Charazani (La Paz), el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales, y autoridades originarias participaron en la celebración.

En todos los actos de celebración se entregaron las ofrendas para pedir permiso a la Pachamama con las tradicionales wajtas (mesas), compuestas por dulces que representan cada uno de los deseos, coca, alcohol, vino, flores y sullus (fetos de llama disecados), que posteriormente son encendidos para ser consumidos por el fuego.

Celebración en Tiwanaku y otras regiones

Para la comunidad aymara, esta celebración y la llegada del año nuevo representan la recepción o llegada de nuevas energías del cosmos junto al retorno del sol, ya que este día es un solsticio y representa el día más corto del año para la región, los aymaras creían que era el día en que el sol se iba y había que ofrecer celebraciones y bailes para que se quedara.

Los rituales y ferias replicadas de la celebración en Tiwanaku también se desarrollan en lugares que se consideran sagrados, es decir el lago Titicaca, Perú-Bolivia, las ruinas o Fuerte de Samaipata, Bolivia, entre otros lugares.

Las personas asisten desde la madrugada a alguno de esos centros rituales dispuestos en La Paz. Allí se celebra el día recibiendo los primeros rayos del sol. Además se realizan ofrendas con la participación de las autoridades del Gobierno.

Otros asisten al salar de Uyuni, Potosí, para recibir los primeros rayos de sol. Las personas no sólo disfrutan de las actividades tradicionales, sino también de la geografía del lugar, que solía ser un antiguo mar.

El Año Nuevo Aymara no sólo se celebra en el pueblo origen de los aymaras, Tiwanaku o Tiahuanaco, sino también en varias ciudades y pueblos de la región andina.

ONU: Día Internacional de la Celebración del Solsticio

El presidente del Estado Plurinacional, Luis Arce Catacora, saludó ayer que la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a propuesta de Bolivia, aprobara el 21 de junio como Día Internacional de la Celebración del Solsticio, en reconocimiento a las prácticas de los pueblos indígenas.

“Saludamos que la @ONU_es haya aprobado, a propuesta de #Bolivia, el 21 de junio como Día Internacional de la Celebración del Solsticio en reconocimiento a las prácticas de nuestros pueblos  indígenas. Esta festividad internacional también ha sido declarada como feriado en #Chile”, escribió el Jefe de Estado en su cuenta de Twitter @LuchoXBolivia.

Este 21 de junio se celebra el Año Nuevo Andino Amazónico y del Chaco 5529. En Bolivia, esta fecha se constituye en feriado nacional, con suspensión de actividades, desde la promulgación del Decreto Supremo N° 173 de 2009.

Tiwanaku (La Paz), cuna de la civilización precolombina nacida 10 siglos antes de Cristo, y desaparecida poco antes de la llegada de los incas, es el centro ceremonial donde confluyen principalmente las personas para recibir el Nuevo Año Andino.

La fiesta también se celebra en otros lugares del país considerados sagrados, como por ejemplo la Isla del Sol, en el lago Titicaca (La Paz), las ruinas de Samaipata (Santa Cruz), Incallajta (Cochabamba), entre otros. También se festeja en varios países de la región.