Cumbre Iberoamericana aprueba propuesta de Bolivia sobre alivio a la deuda externa

ABI / Bolivia Digital.- El presidente del Estado, Luis Arce Catacora, saludó este miércoles la aprobación del comunicado especial en la XXVII Cumbre Iberoamericana sobre el alivio a la deuda externa y crisis económica, propuesto por Bolivia, que refleja la necesidad de generar un espacio de diálogo con los organismos internacionales para enfrentar las consecuencias financieras derivadas de la pandemia del coronavirus.

“Saludamos la aprobación del comunicado especial sobre el alivio a la deuda externa y crisis económica, propuesto por Bolivia, que refleja la necesidad de generar un espacio de diálogo con las instituciones financieras internacionales, con los organismos multilaterales y con los gobiernos con los que se tienen deudas”, sostuvo durante su intervención en la Cumbre que se desarrolla en Andorra.

El Presidente manifestó que la lucha para combatir la crisis en países en desarrollo debe afrontarse de forma integral por todas las naciones en el ámbito multilateral, frente a la problemática planteada, con la necesidad de conversar para que los organismos internacionales financiadores asuman responsabilidades.

En pasados días, en el marco de la Cumbre, los gobernadores de los bancos centrales de los 22 países miembro y altos representantes de diversas instituciones internacionales como el Banco de Pagos Internacionales y el Banco Mundial, se reunieron para dar una mejor respuesta a la crisis sanitaria, social y económica.

Durante el encuentro se abordaron dos cuestiones de gran relevancia. En primer lugar, se debatió sobre las respuestas de política monetaria a la crisis económica causada por la pandemia del Covid-19 y sobre los retos a los que se enfrentan los bancos centrales en la actualidad para lograr el mantenimiento de unas condiciones financieras favorables que permitan consolidar la recuperación.

En general, se defendió que en el contexto actual de elevada incertidumbre y de recuperación incipiente, la política monetaria debe seguir facilitando el mantenimiento de unas condiciones financieras favorables que contribuyan a consolidar la salida de la crisis.

Además, se coincidió en la necesidad de que los bancos centrales, tanto en las economías avanzadas como en las emergentes, permanezcan atentos al posible surgimiento de tensiones en los mercados financieros, que puedan provocar un deterioro de las condiciones de financiación dada la situación actual de aumento notable de la deuda pública y privada.