La Razón.- Miembros del Sindicato de Ramas Médicas de Salud (Sirmes) La Paz cumplieron este sábado su tercer día de huelga de hambre. No dejarán la medida de presión hasta que las autoridades de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) y el Gobierno atiendan sus demandas de destinar el 10% del Presupuesto General del Estado a salud.
“Estamos en el tercer día convencidos de que la lucha por el pueblo boliviano lo vale, es irrenunciable, no hay vuelta atrás”, aseguró el representante del Sirmes, Fernando Romero, una de las cuatro personas que instalaron el primer piquete de huelga de hambre.
Entre los principales pedidos del sector se encuentra el tratamiento del proyecto de ley que establece que el 10 % del presupuesto del Estado se destine para la salud. Romero denunció que los legisladores no consideran esta norma desde noviembre del año pasado.
Además, el sector pide al Gobierno cancelar la deuda de aproximadamente Bs 60 millones por las atenciones a los beneficiarios del Sistema Único de Salud (SUS), lo cual ha dejado en una situación de crisis financiera a los hospitales públicos del departamento, en especial, a los que componen al Complejo de Miraflores en La Paz.
Romero aseguró que sin esos recursos el sistema de salud está desprotegido para enfrentar una eventual segunda ola de la pandemia del COVID-19.
También exigen ser incorporados en la Ley General de Trabajo y que se aplique la nivelación salarial, en especial, para los profesionales que reciben sueldos de técnicos.